Hay una parte del camino de cada uno que se hace al andar. Bien dicho por Don Antonio Machado, Poeta y Sabio.
Pero el camino completo particular, el de cada uno comienza desde antes de cada uno empezar a andar. Empieza desde antes de nacer, tal vez desde antes de la concepción. Cuando algunos futuros padres en un hijo comienzan a pensar. Y es que hay padres a futuro que desde niños piensan, imaginan, juegan con sus hijos de mañana o de pasado mañana. Y tampoco termina con la muerte del caminante. Quedan las estelas y las huellas que no volveremos ni a andar ni a mirar... estaremos muertos ya tal vez, en una sepultura o muertos en vida. Pero el camino y las huellas quedan para el buen o mal recuerdo. Entonces nuestro particular e irrepetible camino pudiera trascender hasta dimensiones que tal vez deseamos, unas veces y otras tantas veces llegará hasta tan lejos que ni el mejor de los adivinos imaginara. Y en otras más el camino morirá para siempre también con nuestra muerte, porque tal vez mientras creíamos vivir, ya estábamos muertos. El Amor ha sido, es y será el mejor acompañante para hacer el camino al andar. Por Amor seré, serás, seremos... mejor dicho por Pablo Neruda, también Poeta y Sabio. Por sus obras los reconoceréis dijo el Poeta y Sabio Maestro: Jesús de Nazareth, aludiendo a sus Apóstoles. Que nuestro camino al andar este siempre acompañado del Amor, no para ser Santos, pues somos humanos, imperfectos, pero perfectibles. Pero que el Amor "tape" los defectos, resalte las virtudes y seamos recordados como "imperfectos, hombre o mujer, como todos... pero amorosos".
Angel Ignacio Chacón Aquino
No hay comentarios:
Publicar un comentario