Me siento entristecido y angustiado
muy brusco, un arrebato de violencia
hirió de lleno, frágil su conciencia
y sin mirarnos más hemos quedado.
Sin yo quererlo un mal ha separado
nuestras dos vidas que con gran paciencia
siempre han unido su poder y ciencia
y juntas tantas pena han purgado.
Quisiera conciliar este quebranto
de la amistad que más ha florecido
quisiera si, con ruegos y con llanto.
Pedirle que olvidara lo que ha sido,
pero el orgullo con su negro manto
malvado consejero lo ha impedido.
René León
Publicado en Pensamiento poético
No hay comentarios:
Publicar un comentario