LA MUJER...

Como una escoba con pies y brazos,
hay momentos en que se vuelve ciclón,
- arrasa y asola-
barre desde las entrañas y suspira en la sombra.

En su húmedo paladar
picaresca y lengua sabrosa,
labios insinuantes
y boca melosa.

Desde su garganta
surgen gemidos de loca,
como lluvia al caer
sin reparo trepidante y aroma..

Cabida en su pecho de cosas hermosas
se desatan llamas cuando dice, ahora,
corazón placentero, cálido y generoso,
alma con ojos que miran amorosos.

Concierto sonoro sus andares graciosos,
giralunas revolotean vigilantes de auroras,
sus parpados cubren la noche entre estrellas lloronas.

... LA MUJER...

Lola Wizner