PREVISIÓN
El jarrón de cristal deja traslucir una pared distorsionada.
En su interior, de forma divergente, los tallos de los claveles se lanzan hacia el techo. Pocos instantes
quedan para que la mano crispada que se acerca lo fragmente con violencia contra el suelo.
PRIORIDAD
23,80 es lo que queda. Echa el cierre. Esa noche no hay cena. Al día siguiente debe llevar flores al hospital.
Las que le den por 23,80.
PSICOFONÍA
Tras la pared se oía una voz. Sonaba ahuecada por los ladrillos. Entre los jirones del sueño, la oían los
vecinos que heredaron aquel edificio decrépito. Los modernos artefactos de radiofrecuencia descartaron efectos acústicos colaterales. Solo en la quietud nocturna se captaba el reclamo del emparedado. Pero el asesino, ya enterrado en postura adecuada, no tenía la conciencia disponible.
PSICOSIS
El vaho del agua caliente cubrió gran parte del espejo.
Ella estaba a punto de salir de la ducha. Seguramente lo vería. Seguramente se asustaría. Seguramente miraría aquellas dos palabras. Seguramente luego querría chillar, pero, temerosa, renunciaría a ello. Seguramente las gotas de agua, enfriándose, habrían distorsionado los perfiles de las letras. Seguramente no podría leer el “te quiero” que él escribió antes de marcharse.
POBREZA
Miraba el libro con gusto a desconsuelo. 781 páginas acabadas. Un día entero de vacaciones aún. Y, de pronto, se vio en la soledad de no tener nada que llevarse a los ojos.
RECURSO
Cuando él fue a comprobar la lista de la compra adherida al frigorífico, ella ya estaba en la reunión. Cuando él la leyó, se frustró: no había anotado las cantidades.
¿Cómo hacer bien el encargo?, ¿cómo acertar? Apenas le costó unos segundos decidirlo: ¡cenarían fuera!
De libro Transfiguración y otros textos de FÁTIMA MARTÍNEZ CORTIJO
No hay comentarios:
Publicar un comentario