DURMIENTE

Tú yacías durmiente
entre sábanas de seda,
yo, peleando el insomnio
que me obliga a vigilar
los laberintos de tu sueño
en la noche henchida
de tortuosos silencios.
Silencios que rompen
al entrar por los balcones
el sonido del oleaje
al batir sobre el rompeolas.
Yaces inquieta sabedora
de que estoy como el faro
aluzando tus madrugadas,
pero ignorante de saber
con quién gozas tus sueños.
Esa agitación que te posee,
esa inquietud corporal,
tu sonrisa y las palabras
murmuradas sin sentido,
me dejan celoso de saber
si ese cuerpo cincelado
por los besos de mi boca,
por mis manos ardientes,
está gozando con otro
o en ese desasosiego
soy parte de tus quimeras
que es para lo hoy vivo.
Mientras tras los cristales
observo las callejuelas,
cuyas luces mortecinas
sombrean tu desnudez,
dibujando las cortinas
dragones de fuego
sobre tu piel canela.

PACO LAINEZ GARCÍA