Descansar en paz musarañas
al limite de lo no débil,
no sientes,
no jodas y ante todo
respeta al prójimo que si se hace
respetar a diferencia de ti.
Justo ahora que no hago caso de
la imbecilidad,
trapecios inexactos con rimel y
avaricia estancada por la no pobreza,
a veces lo miro
(la ciudad)
y lloro y lloro,
la putrefacta perfección de lo no perfecto,
alcantarilla incauta de silencios quietos,
inquieta de no estar quieto(en el trapecio),
vaivén de estremecedor silencio,
soledad.
A veces lo miro(la ciudad)
llanto,
lloro y lloro.
Francisco Serra
No hay comentarios:
Publicar un comentario