DESPIDO IMPROCEDENTE

Era una tarde soleada
Nos quedamos callados
Te vi la cara asustada
Sin saber ir a ningún lado.
La gente se sorprendió
De cómo se te despidió
Sin darte explicaciones
Ni algunas buenas razones
Algo que exigiste
Dando como motivo
La falta de incentivo
Lo que contradijiste.
Eras la empleada del año
Y preguntaste “¿es un engaño?”
No obtuviste respuesta
Porque no podían responder
Ante una verdad
Que no querían ver.
Les dijiste “nos veremos en los juzgados”
Ellos se quedaron callados
Sabían que perderían dinero
Pero tú eras lo primero.
Ante mí te presentaste
Todo me contaste
Sin poder reprimir, lloraste
Pues tu función, era divertida
En esa experiencia ya vivida
A más de ser enriquecedora
Eras buena trabajadora.
Resonó en las noticias
De la empresa, su avaricia
Eso les llevo a la bancarrota
Con ese detalle, el tiempo,
Te echó una capota.

JAUME ALEGRE LASTERRA -Barcelona-