Nave segura en aguas calmadas de correspondencia, pero pudiera ser barca frágil de dudas en mar agitado de indiferencias.
Árbol frondoso de cariño en primavera de emociones, pero con riesgo de perder sus hojas de ilusiones con vientos fuertes de decepciones en un prolongado otoño de desencantos.
Despejado cielo azul de promesas, adornado con vuelos de aves de certezas, pero el mal clima de la falsedad pudiera hacerse presente, oscureciéndolo con grises nubes de engaños, provocando lluvia con la salinidad de las lágrimas entre truenos de lamentos y relámpagos de querellas.
Caudaloso río de entregas, ruidoso en el correr de sus pasiones, pero sus cristalinos líquidos de fidelidad probablemente llegarán a tornarse turbios con el silencio, hasta secar su caudal de interés, y sólo mostrar grotescas piedras de ansiedades en un terreno árido de rencores.
ERNESTO ESCOBAR MOREIRA -ECUADOR-
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