miércoles, 30 de marzo de 2016

LA ESENCIA DE LA HOGAZA


Habla
Lucas

Ha principiado el tiempo de la Pascua,
el tiempo de los pactos, del cordero, de panes sin sabor ni levadura,
de avivar el recuerdo de los hombres...
de recorrer perpetuos calendarios junto a aquel pueblo de hábitos antiguos
y su éxodo de arenas errabundas hacia la eterna sed del horizonte.
El Maestro ha lavado, de rodillas, polvorientas señales que invadieron sucias membranas de fatigas nómades;
ha compartido, con palabras simples, el cáliz de su vino misterioso;
ha trozado la esencia de la hogaza
y ahora yace,
acodado entre almohadones;
extraviado en su mundo indescifrable,
su idioma de parábolas extrañas, esperas largas y silencios cómplices.
Lo he visto estremecerse,
Debatirse entre el Soplo Divino que lo habita
y el temblor de su carne lacerada por promesas de látigos, espinas, un calvario de cruces erizadas
y manantiales de dolor salobre.
Ha hablado del amor, de la esperanza,
de la mano desleal sobre su mesa asumiendo mezquinas ambiciones,
que come de su plato, que lo escucha y que habrá de entregarlo, en sacrificio, al odio de los sumos sacerdotes.
El rastrero fantasma de la intriga se desliza, en secreto, hacia los zócalos,
se hunde entre las grietas encaladas, se agazapa por trágicos rincones.
Y Juan, al que más ama, preguntando, exigiendo perfiles de algún nombre
y el susurro enlutado que señala
y una intención secreta
y un reproche
y el bocado amistoso que le ofrenda a ese absurdo destino impenitente al que llamamos...
Judas Iscariote.
Es un instante mágico, una brecha donde se funde su mirada mansa con la negra agonía de otros ojos fecundando satánicas traiciones.
Y la orden impartida sin palabras
porque así estaba escrito en palimpsestos, tallado en cada piedra, dibujado en las ajadas páginas de códices.
Pues nunca fue posible una mudanza, una azul contricción, un cambio insomne.
Siempre existió esa espalda condenada
y un puñado de siclos miserables aguardando
en el fondo de la noche.

Del libro Crónica de las huellas de NORMA SEGADES -Argentina-
Publicado en Editorial Alebrijes

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