Ven aquí, asómate al balcón,
¿ves a ese coche azul descapotable?
¿No te dan ganas de despeinarse en él?
de recorrer todos los mapas,
de conocer las historias de cada uno de los habitantes
¡Hasta yo, el más conservador me tiento!
¿No deseas saber qué será de nosotros?
¿Qué nos dice este balcón prestado?
¿Su vista será real?
Ven aquí... ¡la vista es genial!
anímate a proyectar esta vista,
la de estas millones de flores,
las de estos millares de árboles,
la de tranquilas calles serpenteantes.
El paisaje atrona como mil verdades...
resbalando en la cornisa de este balcón
Tan solo ven.
¿Alguna vez hemos reído con todas las ganas?
¿Te has entregado a mis placeres?
Porque se presiente un augurio,
las risas, la alegrîa se dan cita...
y ellas no se pintan solas
ni las flores crecen sin canciones,
ni nada puede inventarnos tanto.
¡Ese coche azul está mirando hacia aquí!
el "Mediterraneo" de Serrat enciende motores
y seguro ve a una pareja con ilusiones intactas,
que tiene invitadas a sombras desconocidas,
a cuadros yuxtapuestos e intemporales,
en otros planos y que no van de la mano.
Asómate al balcón,¡ven Jazmín!
hagamos senderos, Jazmín,
caminando por entre esos bosques,
con árboles que se tocan en el techo,
rodeando el mar.
Yo cargaré el mayor peso en la mochila
Y tú se la pintura del cuadro faltante,
la pintura que pinte flechas,
en el sendero del bosque
lindante con el mar...
¿Has observado a los árboles que se tocan en el cielo?
Miguel A. Ortega
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