sábado, 25 de agosto de 2018

NADA NADA


La Mujer que sólo en privado da la esencia, ¿a qué sistema
onírico eleva el sentir?
En pequeños frascos pretende almacenar ciencia y en movimientos
mágicos, destapa al aire sortilegios.
Superstición o heroísmo – más de lo mismo.
Entrando a ese místico recinto donde ella oficia y ofrece filtros,
el hombre viste traje holgado y como los viejos exhibe gusto a morir.
Jo jo – ella cree en encantamientos revivir al desahucio y pasa por
alto el gran factor: no hay solución media.
¡Nada nada! ¡Ningún invento ni ungüento, hará revivir lo muerto!
Bella como es, vierte de los poros sex appeal y a ritmo de coquetería
vende fantasía.
Mas no dará vitalidad al organismo agotado y flácido.
Sacerdotisa despertadora de pasiones balancea curvas voluptuosas
cual serpiente, captando en sí, la voluntad del hombre “simple”.
Él es Quijote fantasioso y terco, y su inclinación a degustar manjares
y jugos fuertes, despertará a su estómago “gastritis” y a su cuenta
bancaria, agotados fondos.
Pero cree en la posibilidad…, - ¡oh, recuperar virilidad en esa parte
de su cuerpo, casi muerta!

OMÍLCAR CRUZ RESTREPO

No hay comentarios:

Publicar un comentario