¿Cuántas caras posee mi amada?
y en cuantas posé mi rostro.
y en cuantas fui manos
que se sujetan a su cintura
que añoran su pecho.
Hoy es azucena y la vi rosa.
Ayer fue algodón
hoy continúa a serlo.
Siento su cáscara en mi piel
y muero por sus adentros.
Es espina de algodones,
yo soy lobo al acecho.
Encantadora es su cara,
la adorna su cabello.
Su sonrisa es mi aurora,
su tristeza mi castigo.
No te escondas
en los quehaceres del mundo!
no te reconozco!
no veo el camino!
¿Tanto te perdiste en mi bosque
que hoy parece ser una jungla?
¿No se sienten las aves en ambos?
¿No recuerdas el calor del sol
y el nacimiento de la luna?
¿Acaso mi esencia desapareció en la tuya?
No responden a tal locura...
Sé donde vives
y sé que en ti vivo.
¿Quién responde así a la vida?
Ella y él, él y ella.
Ya mantiene su nombre mi querida.
MANOLI SAN MIGUEL HERRERA -Italia-
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