EL TAPIZ DE UN DALTÓNICO

Empiezo a poner hilo, una aguja
no veo, necesito...lentes
paso junto a una puerta
una vez, otra, otra.
Cierro los ojos estoy cegata
consigo atravesar, un túnel
al otro lado diviso, luz,
pienso, espero, puedo, llego.
Un tapiz llamado vida
espera para ser bordado
hay amor, dolor, sangre
risas, llantos y cantos.
Bordo en color esmeralda
las esperanzas guardadas
la risa pincelada en el aire,
los llantos gotas de lluvia.
Los cantos, pájaros de colores,
volteando por los tejados,
azul, gris negro, blanco, así es
sol, luna estrellas, ¿cómo reflejaros?
No puedo terminar mi obra
tiene tantos dibujos,
¡tanto hilo necesito, agujas dedales!
Con los cambios de estación
me vuelvo daltónica, confundo
se mezclan en mi mente
azules, lilas, verdes amarillos.
Intuyo que quedará incompleto
este trabajo tan artesano
con tantas puntadas, tantos nudos.
Pasan los días los meses, se acumula.
Otros vendrán con buenos ojos
a mí tanto color me disloca
descifrarán por mí este enigma
se terminará este mi tapiz ,
con cada color a su justa medida.

Mª Carmen Palma