Entre mi vida
y la suya
solo hay amor.
Y cuando escribo
su nombre
en mi corazón,
se tranquiliza
llevándome
a su balcón.
Y las utopías
se vuelven
una canción.
Veo los
sueños de
mi vida en
usted.
Y sé, que
nuestro hogar
esta entre
el cielo y el mar.
Y si me pierdo
siempre me
vuelvo a
encontrar
en su piel.
Vine a buscarla
a esta vida
y me quiero
quedar.
Nadie sabe
lo que me
ha dado.
Solo usted
puede alzar
mi vuelo.
Y si llora el
cielo, juntos
volaremos
hacia la
eternidad.
Quédate
que el tiempo
es nuestro.
El reloj nunca
se detuvo y
hoy me resisto
a mirar el
calendario.
Y si esto
es de otra
vida, hoy
nos encontramos.
Estoy intentando
decir te quiero,
estoy intentando
decir que te
amo.
Me trajo
a la luz
y me quedé
en sus ojos,
en su sonrisa.
Todo este
tiempo estuvo
frente a mí.
Y estaré para
siempre y un
día más.
Ahora entiendo
el amor y esta
entre mi vida
y la suya...
Ecos de un Amor infinito.
Marcelo Soto
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