LA MIRILLA

LA MIRILLA

No miraré por la mirilla,
con cierto miedo y recelo.
!Saldré a la vida sin más!
sin miedo a equivocarme,
con la valentía de reconocer
que por supuesto puedo errar,
mas también siempre podré,
enmendar mi equivocación.
Tratar de aprender de ésta,
intentar ser más paciente,
confiando en dar mi mano,
sin miedos sin recelos...
sin prisas ni ansiedades.
Caminando sola o acompañada
pero siempre transitando,
sin ningún temor,lastrando...
a lo que hay tras la mirilla
de cualquier puerta cerrada.
Simplemente abrirla...!Y vivir!.

MARÍA LUISA HERAS VÁZQUEZ -Barcelona-