EL COMPROMISO
Mi familia me dijo, debes irte,
él se quedará con nosotros, confía en tu gente,
antes de vivir como esposos, debe ser iniciado,
en los templos del sol, donde la luz solar arde.
Sabes que tú eres la poderosa reina de los inmortales,
él debe de ir como tú, y muy bien lo sabes,
si no lo hace, vuestro matrimonio fracasará, pues llevas un dios,
no le quites ese honor de ser uno de nosotros, ámalo,
honra su virilidad, como desean todos los hombres.
Mi amado me habló,
no me quieras con el amor de una madre,
se esposa y aguanta, pues quiero ser el rey de todos,
lo he pedido muchas veces, ámame en ti, pide y reza,
pero obedéceme y deja que ellos me inicien en los templos.
Soy valiente y tú lo sabes, pero llevo una luz oscura,
y debo llevarla brillante como tú la tienes,
déjame esposa, déjame que sea un guerrero de luz,
que me guíen, me enseñen, soy muy valiente,
déjame demostrarme a mí mismo, que soy un atlante,
no me pises mi orgullo, ámame siempre.
...Y ¿qué iba a hacer yo como mujer? pues obedecer,
vinieron conmigo todas mis diosas, a darme compañía,
en la orilla del mar nos sentamos, todas silenciosas,
la noche era plácida y todas juntas me daban,
el calor que nos damos todas las mujeres, unas a otras,
la paciencia, la humildad, el buen hacer y el buen callar,
y la luna nos daba su espléndida luz, de noche clara,
y sumidas en el silencio, esperábamos el alba…
LA RESURRECCIÓN DE MI ESPOSO
Abrí la tumba y vi su cuerpo,
palpé su corazón y estaba muerto,
lo habían matado mis fieros guerreros,
por no ser él, como eran todos ellos.
Mas grité a los magos,
que si él, un día mató a un dragón, lo perdonaran,
no era de nuestro mundo, pero era mi esposo,
y aunque ignorante, yo lo amaba,
y le di un beso en su mejilla, y respiró…
Y al abrir los ojos, le dije,
¿quieres ser de mi mundo? amado mío,
me contestó, si, si estoy contigo,
y oí la sentencia y el veredicto,
diciendo, que él era humano y no divino,
pero si quería vivir conmigo,
debería ser, el dragón alado que me nació,
Holkin lo llamé yo,
así todo sería equilibrio entre los dos.
Y como mago de fuego, se convirtió,
su boca era toda pasión, pues salían llamas
que ardían como fieras en su alma,
sus ojos serian la luz de todos los míos,
y a través de ellos vería yo,
el corazón de la patria y los ancestros,
pues era ya atlante como yo.
y al saberlo todo, me sonrió,
mi amado entonces, sanó.
…Y a caballo los dos, miramos la caravana,
todo estaba dispuesto para la marcha,
lo miré a él , que era el más fiero guerrero,
y levantando su espada, nos cubrió a todos con su alma,
nos dijo, lucharemos para romper las murallas de hielos,
pues queremos llegar a nuestra patria y lo lograremos,
era los primeros icebergs que nos iban viniendo,
pero nos miró y nos dijo, tranquilos todos,
“ unidos, venceremos”
FRAN TRO
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