Resido en un ornato
en sonda alianza
con mi corazón
en una cala escollo
arrecife del alma,
esperanzas de día a día
aisladas entre agujas de reloj,
corrientes esplendidas
de placer y gozo,
ilumina una frescura de sones
las onduladas estelas del viento
en un oleaje profundo
que enlaza espíritu y luna,
una visión de sueños
que gira y sobresale
hasta convertirse
en un solemne torniquete,
martilleo de salmos
que sacuden y rompen
huesos tupidos de acordes
en un goteo ensordecedor
que sube y baja por mis venas,
floto en una burbuja
suspendida en la serenidad
de un dulce corazón,
descansemos,
ciertos violines
preludian felicidad,
presiento una luz olorosa
vientos de sensaciones,
ni tinieblas ni caos,
frente a frente
dos testigos siderales
abrazados diáfanos
al talle del universo.
García de Garss
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