Irradiemos interior,
ese tan nuestro, tan de los otros...
Desde los adentros desabrochemos
los pliegues del siempre queriendo,
tan cerca de los adentros
tan lejanos de nuestra niñez...
Rasguemonos el pecho del sentir,
acariciemos sus cuerdas cual guitarra,
que explote el corazon inundandose,
que se ramifique y roce los alveolos.
Amanezcamos en nosotros, siendo,
cuajando lazos de sangre en vena,
que llegue al coagulo del ser cerebro
y en aborto dulce nos llegue y colme.
Esta deshilachada la intención
y madruga la madrugada en su copa dorada de amor.
Son palabras que vomita el cuerpo,
exceso de alma?excelso silencio.
Enhebrar las hojas en las rimas del otoño,
el pecho y agitado el tiempo,
es hora de amar?es fruto y rama que copulan
palabras a la sombra del lecho que otorga la mañana.
...Es noche de sueños?
soñemos alma, soñemos cuerpo...
LOLA WIZNER Y FERMÍN JESÚS VADILLO
RECITAL ANDALUSÍ EN LOS BAÑOS ÁRABES
Hace 1 hora
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