"¿Y por qué le tendríamos miedo?
me preguntaste con falsa ingenuidad.
No hay mayor deflagración que un cuerpo.
Se teme a las palpitaciones
al exceso de sudor
a la palabras
tanto como al silencio
a la bóveda del paladar
y a la bóveda del vientre
Se teme a las piernas y a las caderas:
son visiones irresistibles,
se teme no verlas
y se teme verlas al mismo tiempo
Es mejor estar siempre vestida
Ocultemos los animales que llevamos adentro
No me enseñes el puma
y yo no te enseñaré la gacela
O vístete de palabras
y tomemos café.
Del libro "INMOVILIDAD DE LOS BARCOS" de Cristina Peri Rossi -Uruguay-
Publicado en la revista Estación Quilmes
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