PIEL A PIEL

Tu sabor y tu aroma lo llevo en mis deseos
y nunca me abandonan.
Te siento respirar y eres sombra en mi sombra.
Soy dueña de tu piel y de tus llamas
¡Déjame que me muera cada vez que te veo!
Desgárrame la piel con tus antojos
soy la luz y la cruz de tu Universo,
Voy para ser la lumbre de tus ojos
y la dulce caricia de tu beso.
Me quedo encadenada a tu cintura
pegadita a tu cuerpo si te espero.
¡Dame tu respirar y tu frescura
para beberme incluso tus despojos!
Y escribo con mis labios en tu cuerpo
y con mi esencia de mujer te mojo,
siento tu mano acariciarme toda
y mi alma te entrego.

María Itza