Desnuda, con mi piel sedosa,
me dejo acariciar con el agua, de la ducha,
a masajes relajantes, me dejo llevar...
En pensares, de recuerdos,
que me van invadiendo, así tus manos,
se deslizaban por mi cuerpo...
En cada curva, de mis fracciones,
con suavidad de tactos, al mismo instante,
nos besamos sin parar, con besos dulces...
Largos y profundos, provocando el instinto,
al deseo de la entrega, a nuestro amor,
de una pasión mutua, excitados...
Efervescentes, descontrolados,
a movimientos de fogosidad,
eufóricos, ardíamos tu piel a la mía....
Buscando, una posición...
cómoda al encuentro, al ardor de la unión,
que nos hacia gemir, de las ganas quemantes,
Que surgían de modos, diferentes,
en el descontrol, de nuestra liviandad,
emerge almíbar del profundo deleite...
Al abrir el camino, en la pose apropiada,
al edén de la miel, de una sutil manera,
al destelle de explosiones...
En agitarnos al ritmo, de nuestro placer,
a tanta pasión, terminando en la cama,
esparcidos con ganas interminables...
Hasta quedar exhaustos... por este delirio,
a tanta atracción del perfume sublime,
del amor como caracoles pegables...
El uno para el otro,
en aquella primavera en ese tiempo...
donde tú eras el picaflor, de mi polen en flor...
MIRTA SAPPER -Paraguay-
No hay comentarios:
Publicar un comentario