Terso, por los siglos, claroscuro
de la noche durmiente.
Con estrellas, en las lindes,
derribadas de las ramas del hombre-sueño;
que es árbol de espacio,
que es hito de luz de emparejadas sombras,
que lanza flechas que hieren, cual Cupido,
dos ciervas incansables, velocísimas,
ciervas fontana,
ciervas agua fresca,
ciervas que son dos almas enamoradas
que dan formas a todo,
que son centro de todo en las sombras;
sombras, que son roce de su viento,
sombras-luz como fuga del viento,...
angustia y deseo.
Pedro Jesús Cortés Zafra -Málaga-
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