lunes, 23 de diciembre de 2013

CEGUERA


Huérfano de luz,
te grito a oscuras mi nombre.
Te prometo que nada será igual,
que mi fracaso
es sólo un paso más.
¿Qué tendrá que pasar para que sepas
que la verdad sólo se ve en las calles?
La ceguera siempre fue contagiosa:
no tengas miedo, somos todos iguales.

Gonzalo Salesky
Publicado en la revista Nevando en la Guinea 38

No hay comentarios:

Publicar un comentario