Que ha cortado mi sueño placentero, haciendo en unos instantes trizas mi pasado, arrojándome a un túnel lleno de fantasmas.
Donde la luz del foco que jamás apago sirve de pantalla, dándole paso a paso cada etapa de mi vida.
Sin saber si estoy despierto aún duermo, recordando cada uno de mis inéditos sucesos, que he dejado ir sin percatarme jamás que el tiempo no perdona.
Aún trayendo un bálsamo de ilusión estos harapos, que cubren a mi arrugado cuerpo.
Romperá mis letras este silencio de soledad, que son tan insignificantes como mi amor.
Ante tu grandeza porque eres una reina, y yo sólo un esclavo de tu platónico amor hoy.
Justino León Ortiz -México-
No hay comentarios:
Publicar un comentario