Algo en ti bella mujer
me tiene desordenado,
taciturno e ilusionado
según es mi parecer,
si yo pudiera tener
y que tú des el derecho,
en el marco más estrecho
de ti y de mí, solitos,
de acariciar suavecito
la belleza de tus pechos.
No es una bella frase
para que sea primicia,
sino sentir la delicia
partiendo desde su base,
en las caricias que hace
mis deseos sean desechos,
pues mis manos son pertrechos
en estas ansias tan locas,
que siempre tú me provocas
con lo bello de tus pechos.
Mi ansia se desatina
cuando por ser atrevido,
doy fin a mi recorrido
donde el fluido germina,
ese botón me fulmina
o me deja muy maltrecho,
tus gemidos son desechos
de tantas y tantas caricias,
y yo siento las delicias
de sentir tus bellos pechos.
ROBERTO BATISTA PARGAS -Cuba-
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