La inocencia de la vida nos lleva a confiar
pensamos que todos son honestos y confiables
el alma pura no ve maldad ante las personas
solo quien confía peca por confiado y dos veces
pequé al darte mi amor desinteresado
me entregué a ti sin medir consecuencia
no vi razón alguna para no amarte,
mas el tiempo me abrió los ojos
todo el idilio se rompió
se fragmento en dos pedazos
y se desquebrajó la confianza
que un día nos unió en uno solo,
no sé qué me depara la vida
seguir el camino sola o contigo amor
no sé qué pensar, no sé qué sentir
no sé si seguir a tu lado o dejarte partir
así sin preguntar, sin hablar
mas la mirada entristecida lo dice todo
no puedo dejarte partir, porque moriría,
moriría de amor y de dolor por tu amor
que se clavó cual puñal en mi corazón,
cada vez que intento arrancarlo sangra
y duele en cada milímetro de mi interior,
es mejor dejarlo ahí sin preguntar
y con muchas respuestas para dar
es mejor no decir nada y solo sentir
sentir todo lo que percibo y no lamento
es mejor desastillar este dolor
y curar el clamor de mi interior
de amarnos por toda la eternidad
hasta más allá del universo
VIOLETA MENDOZA
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