PRISIONEROS DEL DESEO

Conmueves a todos con el sonido de tu voz
y el poder de la palabra,
aunque tu cuerpo tiene una clave secreta
que se abre al amor
cuando en el corazón nace
una memoria de recuerdos.
Te alzo en mis brazos...
para que luego camines con pasos incesantes
hacia el lugar que espera por los dos
para entregarnos nuestras caricias,
y hacernos prisioneros del deseo
en el silencio que grita el nombre del placer.
Recuperamos el tiempo perdido
besándonos y abrazándonos locamente
y desnudos ante nuestra propia verdad,
acostados, tocando nuestros cuerpos,
nos arrastra el olor de nuestra carne
a un juego erótico que atraviesa
nuestras noches de amantes
para que tus pechos y tu flor de vida
hambrientos de pasión
se abran a mi mundo en la entrega total.

Ysidro Parra -Venezuela-