A LAS 11 AM MARCAMOS EL RUMBO...

A las 11 am marcamos el rumbo, viajé.
El día a diferencia y sus deberes
24 horas latiendo una vez más,
Una fatiga y un desuso moran en lo actual.
La música hace su vals en la pared
Y la palabra sale filtrada por la vidriera sin eco,
Su voz y su júbilo atroz.
Incauto voy, todo pasa en mi mente sin equipaje,
Mis versos nacen sobre el asiento
Y el movimiento del auto-bus.
La razón gira con un tiempo de 4 horas
En el reloj del frente.
Hemos pagado para no dar un paso
Aunque bajaremos con manos y presencia
En un sitio diferente, con otro horario y otro clima.
El monstruo de metal da un giro y cierra sus puertas,
Su espíritu de níquel precisó da un ronquido
Despertando sus 600 caballos de fuerza
Bañados con aceite y su crin ardiendo
En cada explosión de diesel.
El pavimento parece una lengua tatuada
De amarillo y blanco rayando la distancia,
Ecuestre senda donde el conductor controla
Su corcel de cien toneladas tan solo con una mano,
Mientras el monstruo de metal y vidrio flota
Sobre sus zapatos de hule y rezado viento
Que trata de detenerlo.
El conductor gasta el tiempo en su pie derecho
Y su mente es una llave, un cuchillo que va
Rompiendo la intemperie hacia adelante.

Belén Aguilar Salas -Costa Rica-