viernes, 22 de noviembre de 2013
CUENTOS DE HEMICICLOS: EL ERRANTE
Exiliado del círculo angélico por haber profanado con soberbia el coro de Serafines, fue condenado a vagar como un demonio sombrío por la tierra.
Su beldad confundía a las almas desprevenidas, podía mimetizarse casi como un humano, solo un espíritu muy elevado podría sorprenderlo, dejando en evidencia su lujuria y crueldad.
Una noche de verano, mimetizado entre los jóvenes intentaba seducir nuevas almas, captando a los soñadores en busca de excitantes aventuras, estos se entregaban a los placeres que prodigaba,
vaciándolos y vendiendo su esencia por espejismos.
La música envolvía la celebración donde los jóvenes danzaban alocados, el Errante puso atención en una joven que también lo había conquistado, las pupilas de ambos levantaron un puente inquebrantable, donde se acortaron las distancias, Sabrina estaba entre sus brazos; subyugado por su belleza se conmovió, casi recordando sus tiempos de ángel, fue menos soberbio, lujurioso y cruel; no concebía su reciente transformación, esta vez el alma de Sabrina lo había cautivado, quiso besarla y fue cuando vio el espíritu de la joven resplandecer como un ángel; era tarde, ella lo había sorprendido en la teodicea del bien y el mal, Sabrina había ganado la batalla contra el Errante. Un círculo de fuego los envolvió y sintió el confinado demonio, una paz infinita, emergiendo de sus penúltimas tinieblas.
Graciela Marta Alfonso (Argentina)
Publicado en la revista digital Minatura 124
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario