miércoles, 2 de agosto de 2017

URDIMBRE DEL ESQUIZO


I.

Dejo sobre telarañas algún pensamiento a cambio de
discreción/ Ella ha sido inquilina de esta casa mucho
tiempo/ Minuciosa/ impasible/ amenaza con divulgar cada
acto.

II.

El espejo es un fastidio/Aquel hombre extraño insiste/
trata de convencer: quiere llegar hasta aquí y desliza su
mirada en busca de fisuras en el azogue/ observo el
adefesio/ sus mímicas de espectro boqueando en la boca
de la consternación/ Apago la luz/ lo ignoro.

III.

Las sacsom son monstruos alados que rondan los
espacios/ heraldos del averno para talar la paciencia/
Empollan sus huevos bajo las sienes/ tras los párpados/ El
zumbido de sus alas lacera tímpanos como el dialecto de los
muertos/ Otean desde su vuelo alguna calma para alimentar
su prole (vástagos de la decadencia).

IV.

El reloj está maldito/ Su corazón trenza la misma cadencia
en un lapso que engulle las ansias/ Ese palpitar es una
condena/ Busca en aquella circunferencia un consuelo
siempre mayor y en su certeza del final se repite/ entonces/
el ciclo geométrico/ interminable.

V.

Alguna puerta ha muerto/ El cerrojo ofrece un réquiem
para la occisa.

VI.

Vicioso/ el cenicero agoniza entre un éter fulminante/ En
su vientre se pudren las horas/ transmutando en
escombros donde pululan augurios del declive/ Infectado
por la ponzoña de la ceniza gime de pavor/ retorcido en el
preámbulo de su defunción.

VII.

Todos ignoran el esperpento de la lámpara/ engendro
luminoso que aclama un ápice de compañía en el hueco de la
noche/ Su gimoteo sirve de alimento a una mariposa bruja
(alimaña que no alcanza a comprender la tentativa/ el acto
para hilvanar alivios) La penumbra es subterfugio/
escapatoria: erguida sobre algún pedestal hace guiños a la
sombra.

VIII.

La realidad es imagen que se escurre/ inasible como soplo
de humo (nube de actos inútiles) Cada paso supone
desmembramiento/ un tajo: mi cuerpo ha dejado los pies
por algún rincón/ sus manos perdidas en otra parte/ Queda
ingrávido/ Leve/ Y sube/ vuela/ llega lejos/ Allá donde no
puedo ya seguirlo.

Milho Montenegro —seud.— (Cuba)
Finalista del IX Certamen Internacional de Poesía Fantástica
Publicado en la revista digital Minatura 156

No hay comentarios:

Publicar un comentario