jueves, 10 de agosto de 2017

IDEA


Aquí no voy. No soy yo.
Esto es solo el reflejo del espejo que miente,
cuestionándome y preguntándome dónde podría haber ido,
anhelando encontrar la realidad algún día.
La leyenda dice: lejos en una tierra lejana
fluye un río que refleja la fuente invisible.
Miles de seres, santos y beatos,
se inclinan como lirios sobre los bancos de arena.
Luz sin límite envuelve a sus ojos,
tiembla de aire, saciadas por una belleza sin igual.
Es el reino de los espíritus perfectos.
Allí se encuentra en la luz eterna mi yo verdadero.
La imagen espejo no es visible en el río resplandeciente.
Una vez fue arrancado por la furia de la corriente
deambula, irreal como en un sueño,
inacabado, roto, en busca de sí mismo.
¿No escucho las olas del río de la lejanía?
Profundo en mis entrañas sus aguas fluyen.
Allí, donde el oleaje de la vida se rompe diariamente,
espero permanecer oculta en el lugar de los dioses.

Del libro Nubes de Karin Boye -Suecia- Traducción Hebert Abimorad
Publicado en Periódico de poesía 99

No hay comentarios:

Publicar un comentario