Detrás de un escote un cuerpo y una mujer,
aunque mejor al revés…
Armas de mujer, como la poesía
regadera de presente, futuro
y vuelo de recuerdos soñados.
Adorno primaveral y estaciones,
corazón cobijo y manos amantes.
Respiro melodioso de siempre canto,
cuerpo de guitarra y sus cuerdas
ojos maravillosos y asombro.
Aullido y empuje,
siempre hacia adelante.
Escritos en el pasado que trae
al presente con sus alas de aire…
Orquídeas de mil formas,
no hay dos iguales.
Enojosas con y sin razón.
Con frecuencia orla en su cabeza
que con dignidad lleva.
Paspartú entre su corazón y su cabeza
amortigua los golpes y le da fuerza.
Primoroso cuerpo diestro y hábil,
sibilina trasnochadora
y mecha que enciende ocasos.
Imposible de psicoanalizar,
su moral y afecto se entrecruza fundiéndose…
…Solo hay dos opciones,
o son ángeles o son demonios…
Lola Wizner
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