TEST DE MORGAN & VORICHILOV

El viejo test de empatía Voigt- Kampfff había sido sustituido por el novedoso de Morgan&Vorochilov. Con él los blade runner nos teníamos problemas en localizar y “retirar” a los androides del modelo que sus constructores denominaban “Definitivo-X”. Hasta el último momento pensé que la humanidad había
triunfado al fin sobre la máquina más perfecta, de una vez y para siempre. Me equivoqué. Todos, en realidad, nos equivocamos, con fatales consecuencias.
Me quedan pocos segundos de vida, y el charco de sangre bajo mi cuerpo aumenta más y más. Por ahí se va mi existencia… pero aunque mi vista se nubla contemplo el rostro inmutable del hombre que nos instruyó en la nueva técnica Morgan & Vorochilov, y que fue y sigue siendo su máximo defensor,
Alexander Fairchild. Él sonríe… muy humanamente, aunque es en realidad uno de los modelos “Definitivo-X”.
El plan de estos androides era muy elaborado, y ha tenido éxito por completo: hacerse pasar por humanos y crear un nuevo test, que jamás les descubriría y sí, por el contrario, hacía pasar por “no humanos” a personas con alguna discapacidad psíquica.
¡Habíamos estado exterminando a seres humanos reales, mientras ellos escapaban a nuestras pesquisas! Yo lo había descubierto hacía apenas unas horas ya que siempre había mantenido suspicacias sobre el nuevo sistema y había aplicado el viejo Voigt-Kampfff a un supuesto androide del último modelo… al que descubrí enseguida, y “retiré” de inmediato. Antes, el nuevo test lo había calificado de “humano”.
Cuando desvelé mi descubrimiento al jefe del departamento este, sin mediar palabra, sacó su pistola y me disparó.
Ahora la vuelve a guardar mientras telefonea a las autoridades. Solo escucho sus últimas palabras antes de que la oscuridad sea total:
−Sí, soy Alexander Fairchild. Uno de esos androides se había camuflado como uno de nuestros agentes, y ha intentado asesinarme. Lo he podido eliminar a tiempo…

Francisco José Segovia Ramos (España)
Publicado en la revista digital Minatura 121