No es que no te amara,
no es que te olvidé
yo te amaba tanto, ¡tanto!
cuando te dejé.
Tus palabras de reclamo
y tus ojos llenos de llanto
parten mi corazón...
¿acaso piensas vida mía
que te dejé sin razón...?
¿Recuerdas cariño
aquella tarde en mi jardín,
cuando un fuerte dolor de cabeza
nubló mi vista, y por unos instantes ya nada vi...?
Esto, se ha suscitado seguido,
mis días están contados...
es la señal de que pronto,
pronto voy a partir...
Mas cuando yo haya muerto
no me llores,
ni a mi tumba lleves flores,
flores, que no he de ver...
mejor, a Dios una plegaria
por mi, ¡implora,
una plegaria llena de amor!
Y guarda muy dentro de ti
en tu corazón,
mis letras, mis poemas, mi voz y mi inspiración...
Tal vez nunca llegues a encontrar
alguien que te quiera igual...
alguien que en cada suspiro,
en cada palabra y en cada mirada
íntegro te dé su corazón...
Mas recuerda vida mía:
¡No es que no te amara!
¡No es que te olvidé!
¡yo te amaba tanto, tanto!
¡cuando te dejé!
Karo Alan -México-
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