EL RECUERDO DE UN PADRE SIGUE VIVO SI SE SIGUE OYENDO SU VOZ

Papá si hoy estuvieras vivo
no sabríamos si al amanecer
todavía estarías en casa
llegaste anoche tarde
no te vimos temprano
saliste a cumplir con tu deber
no hubo tiempo para saludarte
ni para decirte que te vaya bien
padre que los domingos
eras el júbilo de tus hijos
aprendiendo todo de ti
a veces con tus reniegos
muchísimas más con tu interés
que motivaban todas las cosas
que al blanco cielo dirigías la vista
buscando estrellas en la noche
auscultando anillos en los planetas
en el día observando
como la fuerte luz que nos da el sol
son unas flamas que se elevan
por encima de su superficie
chorros de luz que con vida nos llegan
nunca olvidabas que nuestra vista
había que proteger
gustabas del sonido de las bombardas
haciendo disparos a las neblinas
para ver si sus gotas de agua
hacías caer
elevamos cometas al aire
cada vez más grandes
para que alcancen hasta la luna
presente estaba Giuseppe Verdi
con su Nabucco inmortal
Beethoven con la Heroica
devorábamos tus libros
Miguel Ángel Leonardo Bourdelle
Rodin Rafael Sancio Cranach
tu maestro Daniel Hernández
Brueghel Van Gogh Gauguin
Velázquez el Greco Zurbarán
Lazo Merino Vinatea Reinoso
cuadros de todos los artistas
poblaban nuestra imaginación
las civilizaciones que forjaron nuestro país
sus héroes Tupac Amaru Cáceres
Grau Ugarte Albarracín Bolognesi
Manco Capac Garcilaso Huamán Poma
José Carlos Mariátegui
a los grandes hacedores de la Educación del país
sus grandes imperios
tus pinturas de sus personajes
nada faltaba dentro casa
la cultura y el saber fue tu fortuna
tus herramientas nuestra escuela
más importante era un piano que un frigider
la herencia mejor recibida
que tus manos dejaron caer
las preguntas y las respuestas
sobre cada paso de tu historia
hoy añorada en nuestras memorias
el respetuoso trato y cariño
que a nuestra madre de ti siempre vimos
tu afán innegable de que nada entre nosotros se oculte
que la palabra se respetaba
que tengamos la mano abierta para todos
que buscabas siempre dar de ti
engalanabas la casa con música
buscando que instrumentos nunca faltaran
apartando ventajas personales
donabas lo que te asignaban
para una cultura mayor del país
que ahí donde estuviste tus amigos nos recibían
como el gran padre que teníamos
todos te querían y tu recuerdo
lo señalaban con cariño y emoción
los que te escucharon
los que supieron de las anécdotas de tu vida
del gran amor a tu patria
de las tristezas que tus ojos vieron de niño
de las balas arrojadas a los obreros
por manos crueles del enemigo
del cual tuviste que defenderte
de tu responsabilidad desde muy tierno
del trabajo desde pequeño
cruzando desiertos
siguiendo la larga hilera de obreros mineros
rindiendo homenaje al abuelo
que su nobleza de alma heredaste
oíste la historia de los tíos y bisabuelos
que en los campos de batalla
con honor su sangre regaron
al coraje de tu abuela
que al enemigo valientemente enfrentó
que siempre estuviste cuando te necesitábamos
que nunca podremos olvidarte
y si un día tu corazón falló
tu nunca fallaste
y un día que al pueblo se hizo justicia
me dijiste con voz muy clara
ya era tiempo hijito
que suerte tuvimos de oír tu voz

Gonzalo Suárez