DE AMORES PROHIBIDOS

Tú no estás, y el silencio se transforma en el más fuerte de los ruidos.
Y quiero morir aun antes que la misma vida me mate sin empezar a vivir
sumido en el dulce y triste recuerdo de tu ausencia que no me deja morir.

Y llegas tú, como una esperanza perfumada en una brisa primaveral.
Y el silencio se hace verbo, murmullos y grito en la prisa y mis penurias sintiendo la urgencia de amarte y poseerte en el silencio de las lujurias.

La luna te murmura, toda mi ternura, en tu espalda desnuda.
Te amo como aman los abismos azules a los rojo amaneceres naciendo.
¡Cómo no extrañarte! con tus amores prohibidos, y mi sangre ardiendo.

Tus curvas son un cristal ardiente, que enciende mis cimientes.
Dulcemente mis manos te desnudan y me desnudas en tibias penumbras
te posesionas de mi cuerpo y piel, tu lengua de mi boca, en tus premuras.

Poseerte es entregarse a la pasión y a todos los destinos.
Ingreso a una constelación de flores en tu sendero que fluye como fuego
mientras bebo la lujuria de tu piel de pétalos entre la seda de tus pechos.

Tu sed del amor, es como una tempestad de impudicia, en mi deseo.
Tu cuerpo desnudo como brisa se vuelve fuego, tus manos lava ardiente
y te conviertes en un demonio angelical cuando te entregas para siempre.

Mi boca se estrella placentera, entre los pétalos de tus pechos.
Cuando el paraíso tibio de tus curvas forma, lujuriosas, cuerpo y vientre,
en infinito gozo, placer hecho gemido ardiente te entrego mis simientes.

Sólo somos dos cuerpos en uno, ardiendo de pasión consentida.
Mi pasión late en tu vientre caliente y latente como en un paraíso perdido
entre el vértigo fogoso del éxtasis extremo, entre espejismos consentidos.

Me sonríes sonrojada y comenzamos otra vez, apasionados.
Será amor de caricias, brisas y pasión como si así hubiera sido siempre
en el gozo lujurioso de amarte con mis huesos, nuestras bocas ardientes.

Me enamoré de las curvaturas dulces de tu ombligo.
Ya no te vayas, quédate para siempre conmigo.
Y olvídate, de nuestro amor prohibido.

Manuel F. Romero Mazziotti -Argentina-