viernes, 24 de enero de 2014

TU SONRISA.



Hoy he visto tu sonrisa y he puesto precio
a mi vida, nada vale como eso, nada, ni
siquiera una caricia, deseando recibir de
tus manos un roce, me olvidé por completo
cuando vi que en tus ojos brillaba una tenue
luz, y fijando tu mirada a lo más hondo de mi ser
me decías muy suave, y sin tus labios mover,
te dedico esta sonrisa, porque hoy mi querida madre,
mis ojos han vuelto a ver, solo me bastó mirarte,
quizá por segunda vez, para saber que tus labios sonreían
otra vez, gracias mi hijo adorado, gracias por devolverme a mi ser,
Que para una madre no hay nada, como volverte a tener.

GRACIA ROMERO

No hay comentarios:

Publicar un comentario