lunes, 5 de noviembre de 2012

DUEÑO DEL TIEMPO


Pobre criatura,
confiando en tu poder,
desprecias mis valores,
creyéndote el dueño...
de mi ser y de mi  amor.
Puesto en mis altares.
Te exaltas como un dios, sin ver esa pira,
ni los haces de leña acumulados  a tus pies.
Y... te ríes confiado de tu atracción,
juegas con el fuego de los infiernos,
vanidoso, muestras todo tu valor,
alardeas ser el dueño de tu tiempo,
y...sólo estás propagando la llama bajo tu ara,
Yo la encenderé, para convertir tanto ego
en simples cenizas. Y..tú sin comprender.

Mayte Andrade- Benicarló de mi libro inédito ESTELAS

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