lunes, 19 de noviembre de 2012

ALMA VACÍA

Comprendí el silencio, cuando en torno mío nada me quedaba,
estaba vacío
No escuché palabras, no escuché sonidos, ni el trinar de un pájaro,
ni el llanto de un niño
Miraba las cosas en forma distinta, revivía horas
que estuve contigo
Compartimos días, noches de verano, y miramos juntos
amaneceres fríos
La lluvia cayendo, el sol se ponía, mientras caminamos
por playas vacías
Te busco en mi mente, te grito mis penas, el eco me dice,
se fue de tu vida
Te ato a mi sombra, te propongo juegos, mirando tu rostro
te digo “te quiero”
Me trajo tristezas, un adiós dolido, te fuiste una noche,
y me quedé vacío.

Samuel Lijovitzky -Argentina-
Publicado en Suplemento de Realidades y Ficciones 53

No hay comentarios:

Publicar un comentario