A LORCA…

De mis pequeñas letras
a un gigante…

Una alondra en tus manos…
Destinado vuelo a la eternidad.
¡No habrá “Ciudad sin sueño” en tu camino!
Ni otoño que vea caer las hojas del arte que te acobija.
¡Habitarás engendrado en el vientre de un poema!
Tus ojos serán versos acunando
firmamentos,
bocados ilusionados
en la espalda de tus letras.
En tu mirar vagarán las dudas del universo,
tan precario palpitar del mundo
que despedazó tu silueta.
Gritó Ricardo…
-¡Criminales, vais a matar a un genio”
Eran las tres y cuarto de la madrugada,
aquel fatídico 18 de agosto de 1936…

Decías que…

“Un niño trajo la blanca sábana
a las cinco de la tarde.
Una espuerta de cal ya prevenida
a las cinco de la tarde.
Lo demás era muerte y sólo muerte
a las cinco de la tarde.”

A las cinco de la tarde
Federico García Lorca

¡Nunca es en la tarde!
Los verdugos se mimetizan entre las esquelas de las sombras,
¡Más fácil ser tiniebla si estás hecho de penumbras!
¿Cómo pudieron?
Tú ¡Grande!

“Yo soy español integral, y me sería imposible vivir fuera de mis límites geográficos; odio al que es español por ser español nada más. Yo soy hermano de todos y execro al hombre que se sacrifica por una idea nacionalista abstracta por el solo hecho de que ama a su patria con una venda en los ojos. El chino bueno está más cerca de mí que el español malo. Canto a España y la siento hasta la médula; pero antes que esto soy hombre de mundo y hermano de todos. Desde luego, no creo en la frontera política.”

…pero ganó la desventura que fusiló tu belleza,
¡Asesinaron a un inmortal!
De testigos invidentes
está el planeta repleto,
saturado hasta los dientes
de su siniestra ceguera…

“Quiero matar al único testigo
para el asesinato de mis flores
y convertir mi llanto y mis sudores
en eterno montón de duro trigo.”

El poeta dice la verdad
Federico García Lorca

…y
¡Eres trigal ahora!
Flotas vestido de alondra,
decorado plumaje
cuyos fantásticos cristales
te siguen desnudando…

¿Cuál habrá sido tu última evocación?
Poeta…

“¡Que no quiero verla!

Que mi recuerdo se quema.
¡Avisad a los jazmines
con su blancura pequeña!”

La sangre derramada
Lorca

…y digo que solo es por ti
que los jazmines florecen,
¡Canta el campo!
Mueve la brisa tan poderosas espigas,
¡Eres el niño corriendo tras su cometa!
El girasol que ha concebido
la luna.

Scarlet C