EL ESPEJO DE LOS VERSOS.

Ante lo que no puedo vuelo
en el viento, llego discreto
con lunas encendidas en mis
dedos, romance inquieto en la
punta de los besos, filo cortando
tu vestido desde lejos, desabotonando
los mil suspiros dejando desnudo
el pecho de ilusiones secretas.

Cayó la ropa de la distancia quedó
desnuda la ausencia, silueta
embelesando mis ojos cerrados,
bordes exquisito de exacto diseño,
camino empinado hacia al abismo
perfecto, nido húmedo y cálido donde
nacen los deseos, refugio sin paredes
bajo el lucero de tu cuerpo.

Invisibles ante las miradas, tangibles
en el universo de las almas, aire y lluvia
en un torbellino siendo una tormenta,
pasión y deseos abrazados en la cama
del placer besando los sueños, acariciando
las ilusiones, rozando las caderas mientras
enterramos los besos en el abismo de
labios hambrientos.

Apagamos la luz de la razón e hicimos
el amor sobre el piso de la locura,
sin pudor liberamos el grito preso
en el silencio, ahogamos la realidad
en el orgasmo apasionado de la verdad,
fuimos fuego apagando la sed de tenernos,
el suspiro interminable que nos dejó
sumergidos en el abrazo que aun respiro
y revive en la excitación de tus labios
mordidos y humedecidos frente
al espejo de mis versos.

Luis Emilio Tigüilá Robles -Guatemala-