SOLO UN DÍA

Hasta cuando el pobre. ¡Señor!
Pagará las consecuencias.
Del pecado original
de tu nombre y su conciencia.
No pide delirios ni riquezas.
Sino un poco de paz y de nobleza.
Un dia para esbozar una autentica sonrisa. Y,
estar en la balanza de la equidad y la justicia.
Para el poder terrenal no cuenta.
Es una estadistica por corruptos impuesta.
En un sistema deshumanizado y perverso.
Que los amasa en un barro hediondo y espeso.
¡Solo un dia Señor!
Haznos realidad los sueños e ilusiones.
No son ambiguas ni utópicas ambiciones.
Sino lograr la felicidad que tu amor propone.
¡Solo un dia Señor!
Para el verdadero Hombre de sanas razones.
¡Qué ama! Qué siente! ¡Qué sufre en tu nombre!
Y que sabe que su único pecado...
... ¡Es haber nacido pobre!

Eduardo N. Romero -Argentina-