Pronto, pon tu mano
En mi cabeza
Y camina hacia abajo.
Me enteré que me llamabas
Que en tus noches despertabas
Y mientras yo dormía.
Sentía las respuestas del cosmos
Un amor puro y hermoso
Con tus dulces caricias.
Parece haber llegado
Como respuesta
A las plegarias de mis deseos.
Me enteré que te amaba
Desde antes que tú me conocieras
Contuve mis vergüenzas y rubores.
Porque te esperaba
Desde antes, desde siempre
Es que me enteré.
Que amor se siente
Como una daga
Que abre el pecho
E inyecta sus manjares, en cada beso,
En el silencio de mis palabras.
Enrique Palma.
No hay comentarios:
Publicar un comentario