Entre las pasiones de travesuras
de tu dulce mirada que me traspasa,
te estuve buscando.
Buscaba tu risa de niño, tu risa,
que es sonido de campanillas que salpica
mi vida cuando la llenas de esperanza.
Te estuve buscando, por las nubes, con mil
luciérnagas que en la noche vuelan
y saltan entre mis dedos sin llegar
ni tan siquiera a rozarlas.
Te estuve buscando, ¿dónde lucero
de mis sueños te ocultas para seguir
tu estela de plata?
Te estuve buscando como la tierra
busca el agua, como la abeja su colmena,
como la gaviota su roca para dar de comer a sus
polluelos que, en su nido, los picos parecen de nácar.
Te estuve buscando como atormentada alma
que nunca reposa al llegar el alba.
Te encontré entre mis manos, en mis suspiros,
en mis miradas; en el horizonte de celajes
encendidos que se reflejan en mi rostro,
cuando tú llegas hasta lo más profundo del alma.
Juani CamCor
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