Llega el pensamiento
con su turgencia...
Hoy no es nácar ?
Tampoco me acaricia su aterciopelado marino.
Sólo se que de mi pecho se han adueñado terribles dunas
cambiando mi perfil en un instante
ahogando mi corazón en desolado silencio.
En este momento decidió la hora
elevarse en enredada cumbre...
Mientras atolladas letras
luchan para darle sentido a un sentimiento
que a bruces busca conquistar la boca de una guitarra.
Quisiera el trigo diferir el tiempo
pero se impone la siega como la silvestre luna.
Al igual que mis ansias, las que nacieron conmigo
aún cuando hallaron lo sombrío de la selva.
Las raíces amargas se fraguan en el alma
construyendo castillos
que te hacen sentir errante en bosques sin aromas.
Esta noche perdió su frescura...
Deshojo mis pétalos
donde la escala no cuenta madreselvas .
Es crepitante el muro
más la paciencia ha de alcanzar el día.
Son piedras que gravitan con la vida...
La primavera llega
sin importar lo lejana que se vea
devolviendo el amor y el sueño
al territorio del cual un día partieron
Alicia García -Estados Unidos-
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