Metí la mano al cajón de los recuerdos buscando un poco de suelo para poder aliviar este inmenso dolor que lentamente me va consumiendo el alma y el cuerpo que de pronto se va haciendo viejo de tantas penas y tristezas que le causó tu ausencia. Ese cajón tiene guardadas en su interior lágrimas de decepción que de mis ojos cayeron en el momento que te fuiste lejos. Nunca imaginé que la mujer de mi vida de mi lado se marcharía dejando en mí una profunda herida que aún no cicatriza. Yo siento que me faltan tus besos para continuar viviendo pero por más que busco en el cajón de los recuerdos tus besos que me pertenecieron por mucho tiempo no los logró encontrar para embriagarme de ellos una vez más y ya no separarme de ti jamás porque te amo de verdad.
EDUARDO FUENTES
.
No hay comentarios:
Publicar un comentario