Colombia tiene un Pobre Viejecito Sin Nadita Que Comer llamado Gustavo Francisco Petro Urrego,
sólo:
Posee en Bogotá dos propiedades:
una encima de Sindamanoy
(Altos de Hierbabuena),
avaluada en 5.200 millones de pesos;
otra en el Condominio Cerrado Santa Ana,
antiguo centro de Chía de 3.100 millones;
un apartamento en Rosales de 2.800 millones;
dos casas en Coral Gables Miami de más de 1 millón de Dólares;
Penthouse en Barranquilla de 2.900 millones;
conseguido todo con el sudor de su esfuerzo en arduas jornadas trabajo.
Por eso todos los colombianos le tuvimos que pagar la demanda que supera los 200.000 millones de pesos por la reducción del valor de los pasajes de Transmilenio,
producto de su labor dictatorial en la alcaldía de Bogotá.
Me gustaría saber si cuando este pobre viejecito expropie los bienes de aquellos colombianos de bien,
también incluirá los suyos.
SERGINAZ
No hay comentarios:
Publicar un comentario