Extranjera
Danza de fuego
Sé que la muerte es escuchar otras voces
y por eso
poso mi oído
en la cascada de tu río.
Busco la muerte
y camino desnudo entre las piedras
Busco esa voz
¿acaso distante?
¿acaso cercana?
Tal vez en mí
Disfrazada en mí.
Sé que allí
en el silencio obscuro del espejo
está el sonido orquestal de otra mañana,
mi cabeza se agita con el viento
y llueve
Llueve y he sabido con la lluvia
el diccionario abierto del camino.
Del libro La dulce Aniquirona de Winston Morales Chavarro -Colombia-
Publicado en Editorial Alebrijes
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