En los gestos,
de tus besos,
en las caricias,
de tus manos,
siento tu amor,
despierto.
Tu amor desbordado,
húmedo en tu cuerpo,
húmedo en mi sexo.
Tu bien
que me arropa,
por fuera y por dentro.
Tu mirada,
me envuelve,
y tus ojos,
me lo dicen todo.
Y contigo
me encuentro,
sensación,
carnal y de cielo.
Y tus palabras
de ternura
que me causan
sensaciones,
mas allá del sentir,
mas allá de vivir,
y por eso vivo.
Respirando,
el aire
de tu amor
saboreando
el maíz de tus besos.
Todos mis esfuerzos
me llevan, me empujan
hacia ti y hacia ti, yo llego.
Y cuando no,
es posible,
estar contigo,
miro tu silueta,
reflejada en el cielo,
desnuda frente a mí
como son tus deseos.
Pura y desnuda,
como es tu amor,
como es,
el amor nuestro,
claro,
sin nubes,
sin preámbulos,
en nuestros:
”Te quiero”.
Gloria a ti
en la tierra,
y en el amor.
Gloria a Dios
en la tierra,
en las alturas
y en el cielo.
Rafael Pérez
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