Ese cardenal no es fruto del amor.
No te engañes una vez más.
El amor no se expresa a golpes.
El amor nunca está con la violencia.
El amor quiere besos apasionados.
El amor desea caricias sensuales.
No dejes que en nombre del amor
te levanten la mano y tú aceptes
sin denunciar dicho trato.
No creas que cambiará.
Sus promesas de después
son tan falsas como su amor.
Ese persona que te pega
no te ha amado nunca.
Esa persona que te esclaviza
no sabe que es amar.
Convéncete no es digna de tu cariño.
Aunque te sea difícil
trata de olvidarla, de alejarla de ti.
No aceptes sus besos falsos.
Desprecia sus caricias
y aléjate de ella antes que sea tarde.
JOSÉ LUIS RUBIO
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